Si siempre has soñado con tener un loro parlante en casa, pero dudas de poder enseñarle, debes saber que es totalmente posible, y los pájaros parlanchines son bastante comunes. Sin embargo, debes estar preparado para dedicarle mucho esfuerzo, entrenando a tu mascota con metodología y paciencia día tras día para perfeccionar sus habilidades. Además, para asegurarte de que tus esfuerzos no sean en vano, es recomendable familiarizarte previamente con algunos de los aspectos teóricos del proceso de entrenamiento.
Repite las mismas palabras en su presencia.
Para empezar, elige una primera palabra. Debe ser corta y de 2 a 3 sílabas. Los loros aprenden mejor con palabras sencillas como "papilla", "hola", "adiós", "mamá", etc. Di la palabra varias veces mientras miras a tu mascota para que entienda que le estás hablando. Habla despacio y trata de ser lo más emotivo posible para que se interese. Pero evita, sobre todo en los primeros intentos, pronunciar la palabra con diferentes entonaciones, ya que esto puede confundir y aturdir a tu loro.
Tómate tu tiempo y deja que el ave responda a tu discurso por un rato. Al principio, el loro intentará responder solo con sonidos, y luego, poco a poco, empezarás a discernir el contorno de las palabras.
Mantener silencio durante el entrenamiento.
La sala de entrenamiento debe estar tranquila para que nada distraiga al ave, curiosa por naturaleza, de su aprendizaje. Retire el espejo y los juguetes de la jaula durante la lección; de lo contrario, el entrenamiento será ineficaz.
Pero después del entrenamiento, asegúrese de devolverle el espejo a su dueño emplumado para que tenga la oportunidad de practicar adecuadamente frente a él y perfeccionar sus habilidades de pronunciación.
Utilice discos especiales y programas informáticos
Con frecuencia, se utilizan discos especializados y programas informáticos para enseñar a las aves a cantar. Se trata de métodos de eficacia comprobada basados en los mismos principios del entrenamiento vocal: el ave intenta, al principio con torpeza y luego con más confianza, repetir ciertas melodías y cantos. Estos discos se utilizan con mayor frecuencia para enseñar a los canarios jóvenes a cantar.
Sin embargo, es seguro afirmar que los loros también pueden reproducir con facilidad sonidos grabados en dispositivos electrónicos que imitan canciones o melodías. Esto es especialmente cierto si la grabación se reproduce con una voz aguda, ya que este timbre es el que las aves perciben con mayor facilidad.
Los loros también disfrutan simplemente escuchando música rítmica, intentando imitar el canto. Esto suele ocurrir en forma de un peculiar balbuceo, pero es la primera señal de progreso en el aprendizaje de la pronunciación de palabras.
Elógiala por sus primeros éxitos.
No olvides usar el refuerzo positivo durante el entrenamiento: recompensa a tu mascota con golosinas y un tono amable y alentador. Dale un premio especial, que no suele incluirse en su dieta habitual. Este será un método realmente efectivo para entrenar a tu estudiante emplumado.
Ten paciencia, no grites ni te irrites con tu ave, aunque sea terca o desinteresada. Es posible que tu loro esté aburrido o cansado; en ese caso, no insistas y pospón el entrenamiento hasta que esté listo para aprender de nuevo.
Hacer ejercicios
Todos los ejercicios deben ser regulares y las sesiones de entrenamiento deben durar al menos 10-20 minutos al día. Es recomendable programar las sesiones a la misma hora todos los días, ajustando ligeramente la duración según el estado de ánimo del loro.
Los loros no entienden el significado de las palabras, pero pueden asociarlas con acciones específicas, lo cual puede ser muy beneficioso para crear una forma específica de aprendizaje, similar a la enseñanza a niños. Se trata de una forma de memorizar palabras relacionadas con situaciones específicas, por ejemplo: "encuentro" - "hola", "adiós" - "adiós", "alimentación" - "papilla", "comer". El único requisito es que las situaciones sean reales, no imaginarias, para que el ave pueda asociar la palabra que dices con lo que sucede a su alrededor.
Los loros son aves muy inteligentes, con buena memoria y una amplia gama de capacidades para aprender el lenguaje humano. Se comunican con facilidad y establecen vínculos fuertes con las personas, lo que sin duda puede ser una gran ventaja durante su entrenamiento. Sin embargo, enseñar a un ave a hablar con claridad y practicar estas habilidades requiere un esfuerzo y una paciencia considerables.



