La lealtad y la devoción son la moneda más valiosa en una relación a largo plazo. Vale la pena aprender a demostrarlas desde el reino animal. Descubramos qué parejas amorosas son realmente envidiables.
Cisnes
La fidelidad del cisne es un lema que la gente se esfuerza constantemente por emular. Las aves monógamas se han convertido en un símbolo de amor eterno en la literatura, las canciones y el arte. Al elegir pareja, un cisne joven busca complacer no solo a la hembra, sino también a su padre. Tras un largo cortejo, la pareja forma una unión para toda la vida. Se han dado casos de cónyuges viudos que han permanecido fieles a su pareja incluso después de su muerte.
Gibones
Los gibones pueden buscar pareja durante años y pasar mucho tiempo cortejando a una mujer encantadora de otra familia. Las relaciones de apareamiento de estos primates duran toda la vida. Cuidan con cariño a sus hijos y a sus familiares mayores. Machos y hembras son casi idénticos en tamaño, lo que indica igualdad de derechos en la relación y el reparto de responsabilidades familiares.
Lobos
Los lobos son animales profundamente familiares. Viven en manadas, donde cada miembro se dedica a su familia y cuida de sus vecinos. Las parejas de lobos son excepcionalmente fuertes. Los machos cuidan con ternura a sus parejas, protegiéndolas celosamente a ellas y a sus crías. A cambio, las hembras son incondicionalmente fieles a su pareja y le permanecen fieles hasta la muerte. Los lobos no son ajenos a la ternura en sus relaciones; les encanta coquetear entre sí y siempre buscan la cercanía.
Tórtolas
Las danzas de cortejo y el cortejo de las tórtolas culminan en una unión de apareamiento para toda la vida. Estas aves son parejas devotas y cariñosas. Tras el apareamiento, las tórtolas comienzan a construir y amueblar el nido. La pareja suele utilizar este "hogar" durante un largo periodo, reforzándolo y mejorándolo con el tiempo. Se turnan para incubar los huevos y crían juntos a los polluelos.
Castores
Los castores son una sociedad matriarcal. Sin embargo, las hembras dominantes de las familias siempre demuestran sabiduría y tacto, lo que fortalece sus matrimonios. Los machos de las familias de castores son trabajadores y leales, pero también muy celosos. Están dispuestos a luchar por su amada con cualquiera que se interponga en su camino.
Agapornis
Los agapornis son una pareja que no soporta la separación, ni siquiera por un segundo. Estos adorables loros eligen pareja a los dos meses de edad. Pasan toda su vida disfrutando de la compañía de su pareja, cuidándose con ternura. Y aunque la época de apareamiento solo ocurre en primavera, los agapornis se cortejan con ternura durante todo el año.
Albatros
Algunos albatros circunnavegan el mundo varias veces durante su vida. Sin embargo, su pasión por los viajes no les impide formar parejas monógamas: siempre regresan con sus parejas. Un macho joven puede pasar varios años buscando pareja. Con el tiempo, la pareja desarrolla un conjunto único de señales que les permiten encontrarse. Los rituales de apareamiento se acompañan de graznidos, chasquidos de pico y besos (agarrar el pico de la pareja).
Pingüinos
Las parejas de pingüinos también prefieren mantenerse fieles a distancia. Machos y hembras se reúnen durante la temporada de anidación, que dura unos 30 días al año. A pesar de estas largas separaciones, los pingüinos logran mantenerse fieles a sus parejas. Las estadísticas muestran que siete de cada diez parejas se reúnen anualmente para tener crías.
Águilas
Las águilas son muy conservadoras y monógamas. Se aparean de por vida, y algunas permanecen fieles incluso después de la muerte de su pareja. Las familias de águilas comparten responsabilidades. La hembra cuida del hogar e incuba los huevos, mientras que el macho caza y protege a la familia. Las águilas crían a sus polluelos de forma cooperativa, ayudándolos a adquirir las habilidades necesarias para la edad adulta.
Zorros esteparios
Los zorros esteparios se aparean de por vida e incluso por más tiempo. Se han dado casos de zorros que permanecieron fieles y solteros tras la muerte de una hembra. Son esposos muy cariñosos y afectuosos. Cortejan a la hembra elegida antes del apareamiento y durante la gestación. Una vez que nacen los cachorros, el macho suele abandonar a la familia, pero continúa buscándolos y protegiéndolos con ternura.
Caballitos de mar
Los caballitos de mar suelen formar parejas monógamas. Estas son parejas bastante interesantes e inusuales. La hembra inicia el cortejo. Tras elegir a su pareja, la pone a prueba con una danza apasionada durante tres días. Tras el apareamiento, el macho lleva a la cría y da a luz.
Cálaos de dos cuernos
Los cálaos comunes también forman familias sólidas. Su compañerismo es excepcional. Tras un romántico ritual de apareamiento, acompañado de encantadores cantos, las aves comienzan a construir el nido. El macho valora la opinión de su nueva esposa y trabaja incansablemente hasta que ella esté satisfecha con su nuevo hogar. Mientras incuba los huevos, la hembra permanece desinteresadamente en el nido, mientras el cariñoso esposo se encarga de las tareas domésticas y la alimentación.
Cathartes negros americanos
El katarat negro quizá no sea el más llamativo en apariencia, pero es un maestro del cortejo. El ritual incluye no solo danzas de cortejo, sino también una elegante exhibición de vuelo. Tras ganarse el favor de una bella dama, el macho le permanece fiel de por vida. Los katarat son hombres de familia concienzudos y están dispuestos a compartir el cuidado de las crías con la hembra.
Bobtails australianos
La conmovedora historia de amor de los lagartos de cola corta no es precisamente dinámica. Los machos persiguen a su objeto de afecto durante varios meses, coqueteando lenta y tiernamente con ella, lamiéndola y empujándola suavemente. Tras el apareamiento, el macho y la hembra se reencuentran cada temporada, permaneciendo fieles a su pareja.
La devoción y el amor verdadero en el mundo que nos rodea invariablemente nos llenan de alegría. El amor eterno existe y vive en el corazón de todos los amantes, tanto de los que tienen piernas como de los que tienen plumas y cola.
















