Los gatos blancos de cualquier raza son aristocráticos, raros y más llamativos que los gatos de otros colores. Por eso son increíblemente populares. Mantener su pelaje blanco como la nieve requiere mucho tiempo, esfuerzo, paciencia y gastos por parte de sus dueños. Otro problema potencial es la sordera total o parcial de la mascota.
¿Por qué es común la sordera entre los gatos blancos?
Los gatitos blancos aparecen en cualquier camada si ambos progenitores (o solo la madre) son portadores del gen W- (Blanco Dominante), un gen mutante dominante responsable del color del pelaje y del iris. Este gen suprime casi por completo la producción de cualquier pigmento de color. Durante el desarrollo fetal, el gen W- causa la degeneración del ganglio de Corti y la consiguiente destrucción de la cóclea. Esta afección es incurable y los gatitos sufren sordera permanente.
La pérdida auditiva congénita se distribuye de forma desigual entre las Blancanieves. Investigadores de la Universidad de Cornell (EE. UU.) han identificado los siguientes patrones:
- Los animales de ojos azules son sordos en 65-85 casos de cada 100;
- ojos impares - 40 de 100;
- Los ojos no azules reducen los riesgos a 17-22 sobre 100.
Las razas de pelo largo (angoras y maine coon) sufren de sordera bilateral o unilateral cinco veces más frecuentemente que sus contrapartes de pelo liso. Los gatos blancos, por lo demás, gozan de buena salud y se desarrollan con normalidad, compensando su pérdida auditiva con una mayor sensibilidad a las vibraciones y reconociendo a las personas por sus pisadas, tacto y olor.
Cómo determinar si un gato es sordo
El comportamiento extraño en un gatito con pérdida auditiva unilateral o bilateral no es inmediatamente perceptible. Cuando llega un nuevo miembro a la familia, su comportamiento inusual puede explicarse fácilmente por miedo, incertidumbre o adaptación a un nuevo entorno. Un problema solo debe sospecharse en animales provenientes de un criador; este tiene la obligación de reportarlo.
El proceso de adaptación ha terminado, pero la gata no responde a su nombre ni a los sonidos asociados con la alimentación, como tocar el refrigerador, el golpeteo de un tazón o el crujido de una bolsa de comida al abrirse. No le interesan los pasos, los portazos ni las voces de personas y animales. En cambio, empieza a maullar fuerte a la menor provocación. El dueño empieza a sospechar que tiene problemas de audición.
Puedes probar esto en casa. Fuera de la vista de tu mascota, haz cualquier ruido fuerte y agudo: deja caer algo que suene, aplaude o grita. Sin embargo, incluso si reacciona, es imposible asegurar que el gato se giró hacia el ruido, en lugar de hacia la fuente de vibración o el flujo de aire.
La mejor solución es una visita al veterinario. Si un examen exhaustivo confirma una afección congénita, deberá considerar cómo criar, cuidar y brindarle una vida cómoda a su mascota.
Pero primero, es importante entender que un gato no siente ninguna emoción por su singularidad. Nació así y vive así. Los humanos tendrán que adaptarse.
Cómo entrenar a un gato sordo
El entrenamiento de estos especiales Blancanieves se diferencia del entrenamiento regular para gatos solo en que las palabras se sustituyen por gestos. Por ejemplo, para llamar a un gatito, debes acariciar tu pierna o mover la mano. El gato debe poder ver a su humano. Los animales sordos son muy sensibles a los movimientos de sus dueños y los recuerdan bien.
La cama de un gato sordo debe ubicarse en el lugar más seguro posible, evitando situaciones que puedan incomodarlo o asustarlo. Al ser sordo, necesita poder ver a cualquiera que se acerque y poder escapar.
Evite tocar bruscamente a un gato dormido o acercarse por detrás. Se recomienda tener cuidado al caminar, especialmente al anochecer, para evitar pisar a un gato que esté tumbado tranquilamente. Se puede colocar un collar con cascabel; no lo molestará y será más fácil localizarlo.
El entrenamiento para usar la caja de arena es igual que para todos los gatos, y el descontento con el uso descuidado del baño puede expresarse moviendo un dedo o dándole una palmadita suave en el trasero. Luego, colóquelo en el lugar correcto. El entrenamiento para usar la caja de arena está completamente establecido a los seis meses.
Es muy peligroso para los gatos con discapacidad auditiva estar solos fuera de casa. Las calles están llenas de enemigos: coches, perros y niños y adultos indisciplinados. Por lo tanto, en la ciudad, es aceptable tenerlos en un apartamento, mientras que en el campo, deben estar en una caseta y su dueño debe acompañarlos en los paseos. Solo se permite que anden sueltos en zonas con una valla segura y suficientemente alta.
Claro que los gatos sordos requieren atención y cuidados, pero las recompensas son muchas. Los dueños de gatos blancos sordos afirman no conocer una mascota más leal, cariñosa, atenta, inteligente e interesante. Hay 400 millones de gatos en el mundo, y solo el 5% son blancos. Y solo entre el 1% y el 2% de los gatos blancos tienen pérdida auditiva. ¡Algo realmente raro!
