Mi perra no encontraba un lugar fijo para descansar. Y estaba harta de limpiarle el pelo de los sillones y sofás. Así que decidí coserle una cama mullida con el suéter viejo de mi marido.
Claro, podría comprar un producto ya hecho en una tienda de mascotas. Pero, primero, son caros. Y segundo, me encanta coser y siempre es un placer hacer algo útil para el hogar.
Para este trabajo necesité los siguientes materiales y herramientas:
- un suéter viejo, preferiblemente de talla grande;
- almohada o relleno sintético;
- tijeras;
- trapos;
- agujas.
Descripción del proceso:
- Compré un suéter muy grueso y abrigado. Asegúrate de que la tela sea muy gruesa.
- Corté el jersey de cuello alto y lo guardé. No lo tires de inmediato; podrías necesitarlo más adelante.
- Tomé un hilo del mismo color y cosí con cuidado el agujero. También cosí la parte superior de la prenda al ancho de la manga.
- Tomé un poco de relleno sintético y rellené firmemente las mangas y la parte superior del suéter.
- Luego cosí las mangas a los lados del “cuerpo”.
- Rellené el interior del "cuerpo" con una almohada. También puedes usar cualquier relleno sintético. Lo más importante es lograr una suavidad moderada que garantice la comodidad de tu mascota.
- Cosí los bordes de la parte inferior para asegurar el relleno en el interior.
- Uní y cosí las mangas. Ahora necesitaremos el cuello alto. Si te falta tela, úsala para compensar.
- Una vez conectadas todas las piezas, comprobé si había fijado todo bien para que el “relleno” no se saliera por ningún lado.
Apenas había terminado el trabajo cuando mis mascotas —el gato y el perro— empezaron a correr a buscar su nuevo y suave hogar. Tan solo media hora de trabajo nos trajo alegría tanto a mí como a los animales.



