Al seleccionar razas de mascotas, los humanos se fijan objetivos específicos. Por eso, cada especie tiene sus propias características morfológicas y fisiológicas. Desafortunadamente, la mayoría de las razas pagan un precio por esto en términos de salud. Analicemos varias razas de perros cuyos ojos requieren una supervisión y un cuidado minuciosos por parte de sus dueños.
Bulldog francés
El Bulldog Francés es un perro pequeño y robusto, con ojos grandes y expresivos. Para disfrutar de su compañía durante mucho tiempo, es importante prevenir cualquier problema de salud que pueda surgir a medida que madura.
Los problemas oculares son uno de los problemas más importantes que puede experimentar un dueño de bulldog francés. Veamos los más comunes.
- Mayor riesgo de lesiones debido a ojos grandes y saltones. Al pasear a su mascota por el bosque, preste especial atención a las ramas y ramitas que sobresalen.
- Párpado de pájaro. No es estético, pero se puede tratar y recomponer en casa. Solo en algunos casos es necesaria la cirugía.
- Conjuntivitis. Puede ser causada por diversas infecciones. Antes de administrarle antibióticos a su mascota, consulte con su veterinario qué medicamento será eficaz en su caso.
Los ojos de un bulldog francés no requieren cuidados especiales; es importante brindarles un entorno cómodo tanto en interiores como en exteriores. Por ejemplo, minimice los paseos cuando haga viento. El viento y las corrientes de aire pueden provocar un lagrimeo excesivo, lo que puede provocar inflamación ocular.
Pueden formarse costras marrones debajo de los ojos. Para evitarlo, limpie estas zonas a diario con un paño húmedo y mantenga el cabello alrededor de los ojos lo más corto posible.
Schnauzer miniatura
El Schnauzer Miniatura es una raza de perro pequeña y amigable que disfruta mucho interactuando con su dueño. Los problemas oculares se consideran los problemas de salud hereditarios más graves. Veamos algunos.
- Atrofia progresiva de retina. Esta afección puede detectarse en cachorros a partir de los seis meses de edad. Al año de edad, los perros pierden la visión en la oscuridad y, a los tres años, pierden la vista.
- Enrojecimiento de los ojos. La mayoría de los dueños lo ignoran, pensando que desaparecerá solo. Sin embargo, el problema podría no deberse a arena en los ojos, sino a un signo de glaucoma.
- Conjuntivitis. Esta afección puede ser provocada por una alergia común.
- Catarata. Esta afección hace que el cristalino se opaque, lo que provoca mala visión y una disminución drástica de la misma.
- Displasia de retina. El desarrollo de la retina se ve afectado incluso durante el período fetal. Estos trastornos pueden provocar ceguera total en las mascotas. En las camadas de cría, los cachorros son examinados por un oftalmólogo a partir de las ocho semanas de edad.
Cocker
Esta raza es conocida por su alto nivel de actividad y buen carácter. La falta de ejercicio y un estilo de vida sedentario pueden afectar su salud. Una nutrición adecuada, así como el cuidado del pelaje, las orejas y los ojos, también son cruciales.
Los cocker spaniels son propensos a sufrir ciertas enfermedades oculares.
- Síndrome del ojo seco. Esta afección se produce debido a una producción insuficiente de lágrimas. Los ojos de los perros se enrojecen e irritan. Esta afección requiere tratamiento médico.
- Prolapso del tercer párpado. Los ojos de la mascota se enrojecen e hinchan. Esta afección también se conoce como "ojo de cereza". En este caso, solo la cirugía puede ayudar.
También puede producirse una inflamación leve simplemente por la entrada de objetos extraños en el ojo. Es importante limpiar los ojos de su mascota con agua tibia todos los días. Cualquier secreción ocular requiere una consulta veterinaria.
shar-pei
El Shar-Pei es una de las razas de perros más antiguas. Es un animal robusto con numerosos pliegues en el cuerpo. Al igual que otras razas especiales, los Shar-Pei son propensos a diversos problemas de salud, incluyendo problemas oculares.
- Inversión del párpado. Puede afectar el párpado inferior, el superior o ambos. La inversión provoca traumatismo corneal, enrojecimiento, lagrimeo y molestias.
- Conjuntivitis. Los perros son propensos a diversas infecciones, por lo que la conjuntivitis acompaña a casi todas las enfermedades. Se trata localmente tras una revisión veterinaria.
- Queratitis. Esta afección suele ser consecuencia de la inversión del párpado.
- Prolapso de la glándula del tercer párpado.
- Glaucoma. Esta afección provoca que el párpado se incline hacia adentro. Las pestañas irritan la córnea, provocando su inflamación. Si no se trata, puede provocar ceguera.
- Luxación primaria del cristalino. Esta afección afecta a ambos ojos. Provoca la destrucción de las fibras que mantienen el cristalino en su lugar.
- Entropión. Esta afección también se asocia con un párpado invertido, que irrita constantemente la córnea.
- Las cataratas son una enfermedad hereditaria. Una simple lesión puede desencadenar su desarrollo. El cristalino se vuelve opaco y el perro empieza a perder la visión.
Esta raza es propensa al lagrimeo excesivo. Si se produce una infección, pueden desarrollarse úlceras en el globo ocular. En este caso, es necesaria una intervención quirúrgica.
Es importante prestar atención al diagnóstico de las enfermedades de nuestra mascota, ya que si la enfermedad es de carácter genético no es aconsejable la cría del animal.
Los ojos no son el único problema hereditario que pueden tener nuestros amigos de cuatro patas, pero son a los que debes prestar especial atención y hacer todo lo posible para mantener a tu mascota sana y feliz.






