Las razas de gatos más caras se consideran ejemplares raros, únicos y de raza pura, cuyo desarrollo ha llevado mucho tiempo a los criadores.
Gato de Bengala (1–4 mil USD). Su característica distintiva es su elegante pelaje color leopardo. Estos gatos buscan el contacto constante con sus dueños y les encanta jugar en el agua.
Safari (4–8 mil USD). Los gatos de esta raza combinan la rica coloración de un gato salvaje con la docilidad de un gato doméstico. Son tranquilos, inteligentes y activos.
Kao-mani (7-10 mil dólares). Las características distintivas de la raza incluyen su pelaje blanco como la nieve y liso, y sus penetrantes ojos amarillos o azules. Estos gatos son sociables, activos y fáciles de entrenar.
Chausie (8-10 mil dólares). Estos esbeltos felinos, de patas largas y adorables mechones en las orejas, guardan un asombroso parecido con los linces. Son inteligentes, sociables y curiosos. No toleran la soledad.
Sabana (4–22 mil USD). La raza más grande de gato doméstico, con un peso aproximado de 15 kg y 60 cm de longitud, y un exuberante pelaje moteado, se distingue por su excepcional inteligencia, carácter tranquilo y actividad.
Entre la variedad de razas, algunas son particularmente caras; cada una tiene sus propias características únicas, y cualquiera que pueda permitirse una mascota así podrá elegir un animal a su gusto.







