¿Recuerdas el viejo proverbio inglés: "No despiertes a un perro dormido"? Al fin y al cabo, cualquier sabiduría popular se basa en años de experiencia y, a menudo, tiene respaldo científico. Así que, en este caso, es mejor no molestar a tus mascotas mientras descansan, a menos que quieras causarles problemas a ambos.
No es seguro para los humanos.
El sueño de las mascotas, al igual que el de los humanos, se divide en dos fases. Inmediatamente después de dormirse, comienza una fase de sueño ligero, caracterizada por una respiración tranquila y un ritmo cardíaco lento. Curiosamente, durante estos momentos, un perro o un gato pueden, hasta cierto punto, observar su entorno, oír sonidos y comprender su ubicación.
La segunda fase es el sueño profundo, o sueño REM, que dura unos 15 minutos. Los expertos creen que es cuando las mascotas sueñan. Algunos animales incluso mueven las patas, suspiran, gimen o maúllan suavemente.
Despertar a un perro o gato mientras duerme profundamente es extremadamente imprudente, ya que el animal está completamente desorientado en ese momento. Una mascota repentinamente perturbada puede volverse agresiva con el dueño indisciplinado.
Recuerda, ni siquiera el perro o gato más fiel se dará cuenta de inmediato de que su querido dueño está a su lado. Si algo sucede y necesitas levantarte de inmediato, simplemente llama al animal con calma, pero bajo ninguna circunstancia grites ni lo molestes.
Esto es perjudicial para la salud de la mascota.
Las mascotas de cuatro patas que son despertadas por sus dueños a deshora por alguna razón pueden tener los mismos problemas. En primer lugar, es casi seguro que el animal experimente un estrés leve. Además, si esto ocurre con frecuencia, el gato o perro comenzará a sufrir privación del sueño.
Recuerda que los perros duermen aproximadamente medio día, mientras que los gatos duermen la mayor parte del día. La interrupción constante de su descanso provoca debilidad y deterioro de la salud, al igual que en los humanos. Por favor, no les causes problemas innecesarios a tus fieles amigos.
Los científicos aún no han llegado a un consenso sobre si se debe despertar a un gato o un perro que sufre una pesadilla. Generalmente, se acepta que los animales deben pasar por todas las fases del sueño para recuperarse por completo. Sin embargo, si aun así quieres ayudar a tu mascota, llámala discretamente. Una vez que se dé cuenta de dónde está, intenta convencerla de que todo fue solo un sueño.
Los carteles aconsejan no hacer esto.
Existen muchas supersticiones divertidas en todo el mundo relacionadas con los animales dormidos. Por alguna razón, la sabiduría popular de diferentes países prohíbe unánimemente despertar a perros y gatos.
Por ejemplo, los franceses creen que un hombre que despierta a un gato inevitablemente experimentará dificultades en su vida amorosa. Por lo tanto, incluso si un parisino no es supersticioso, lo pensará dos veces antes de molestar a una mascota que duerme.
En la cultura rusa, es costumbre tratar a los fieles amigos caninos con reverencia. No se les debe despertar, enfadar, asustar y, sobre todo, no golpear; se cree que hacerlo dejará al cruel dueño sin suerte durante tres años. ¡Se lo merece!



