Los perros han sido compañeros humanos desde hace mucho tiempo, pero aún nos sorprenden con su comportamiento. Por ejemplo, muchas personas no se explican por qué sus mascotas, independientemente de su tamaño, insisten en dormir sobre sus patas, boca abajo o incluso sobre su cabeza. Los expertos creen que hay varias razones por las que los perros duermen directamente sobre sus dueños.
Razones principales
Desde la perspectiva de un perro, es difícil imaginar un mejor lugar para dormir que encima de su amado dueño. Este comportamiento es instintivo. Los perros son animales de manada y, cuando se disponen a pasar la noche, siempre prefieren permanecer lo más cerca posible unos de otros. De esta manera es más cálido y seguro.
Tras ser domesticados, algunos no han abandonado sus hábitos salvajes. El frío o la inseguridad pueden hacer que duerman con su dueño. Diversos estudios han demostrado que los perros buscan más activamente la compañía de su dueño si hay algún estímulo en casa: un niño, invitados ruidosos o una nueva mascota.
La compañía de su dueño tranquiliza a un perro. Se siente especialmente bien no solo cuando está cálido y protegido, sino también cuando escucha el latido de su corazón. Además, estar con una persona lo reconecta con su infancia, cuando la gente solía cargarlo para acariciarlo, calmarlo y protegerlo.
Los perros también son considerados una especie de "médicos". No solo pueden diagnosticar enfermedades a tiempo, sino también comenzar a "tratarlas", actuando como una almohadilla térmica biológica. Por lo tanto, si su mascota se apoya constantemente sobre su hígado o estómago, o incluso se arrastra directamente a su cabeza, es hora de consultar a un médico.
Dormir cerca: ventajas y desventajas
No todos los dueños se alegran cuando su mascota se sube a sus brazos. Sin embargo, esta situación tiene varias ventajas:
- Dormir juntos realmente es más cálido.
- La presencia de un perro en la cama tiene un efecto calmante no solo en él, sino también en su dueño: ocupa un espacio que, por alguna razón, ha quedado vacío. Los humanos, al fin y al cabo, somos animales de pareja, y dormir junto a alguien es natural para nosotros.
- Los cinólogos describen casos en los que un perro que permaneció acostado sobre su dueño durante la noche ayudó a curar incluso las enfermedades más difíciles.
Por supuesto, también hay desventajas:
- Higiene. Un perro que tiende a dormir sobre su dueño necesitará ser lavado y cepillado con más frecuencia.
- Parásitos. Los humanos pueden infectarse con los mismos helmintos por contacto cercano. Por lo tanto, deberá vigilar más de cerca la salud de su mascota.
- Malestar. El perro no entiende que puede ser pesado y ocasionar ciertas molestias al dueño, despatarrado sobre su estómago.
- Dificultades en la vida personal. No todas las parejas apreciarán a una “tercera persona” peluda que aparece en la cama en el momento más inoportuno.
Cómo evitar que un perro duerma sobre su dueño
El mejor consejo que se puede dar a los nuevos dueños de perros es que no deben entrenar a su perro para que se suba a la cama de su dueño. Si ya pasó el momento, ten paciencia. Es difícil destetar a un perro adulto sin causarle daño.
Para ello, primero prepárale una cama cómoda y practica la orden "quieto". Después, dirígela con firmeza pero con suavidad cada vez que intente subirse a tu dueño. Si obedece la orden, acércate y elógiala para que no se sienta excluida.
Lo mejor es cerrar la habitación por la noche. Claro que el perro extrañará su hogar y podría gemir en la puerta. En ese caso, debes devolverlo a su lugar con cuidado, pero con firmeza. Después de unos días, tendrá que aceptar esta regla.
Según las estadísticas, la mayoría de los dueños de perros permiten que sus mascotas duerman juntas, creyendo que así se sienten mejor. Hay algo de cierto en esto. Sin embargo, dormir separados no es particularmente perjudicial si se hace con prudencia. Así que la decisión es totalmente del dueño.





